He de confesarlo, desde la primera puesta me enamoré de esta nueva New Balance FuelCell SuperComp Elite v4. Para ser más concretos, del tacto de su mediasuela, ese “nuevo” FuelCell (luego veréis por qué entrecomillo lo de nuevo), un FuelCell con un tacto que enmascara la sensación de la placa de carbono y que nos da una zapatilla de competición más fácil de llevar, sobre todo en la larga distancia donde la fatiga desvirtúa con el paso de los kilómetros nuestra pisada.

Nos vamos a quitar rápidamente lo más negativo de la zapatilla y ya dejamos para el final todo lo bueno, que es mucho, y que supera en la balanza, con creces, a lo menos bueno. Pues bien, esta parte menos buena sería su peso, y es que el peso oficial son 237g. Algo pesada si tenemos en cuenta que esta semana ASICS ha presentado sus METASPEED Paris en 185g aproximadamente. No es una zapatilla pesada ni mucho menos, y luego su respuesta en carrera va a disimularlo un poco más, pero son deberes a mejorar para la futura v5.

Mediasuela de PEBA y placa más fina

Sí, en el título veis PEBA y no FuelCell, y es que este es el cambio más significativo que ha sufrido la zapatilla. Su mediasuela es 100% de PEBA, pero la denominan FuelCell. El tacto sigue siendo blando, aunque a mí me da la sensación de que es algo más “gomoso” y no tiende a hundirse tanto en cada pisada. Por supuesto, también es más reactivo y la agilidad de la zapatilla se la debe en gran parte a este retorno de energía y no tanto a la sensación de la placa.

Al principio os decía que la espuma enmascara la sensación de placa, esto se debe a varios factores. Primero a la gran cantidad de espuma que tenemos bajo los pies. 40mm en la parte del talón y 36mm en la parte delantera. La parte del talón se mueve en ese límite de los 40mm que va siendo más normal en este tipo de superzapatillas, pero por lo que cuenta New Balance, hicieron varios prototipos con diferentes drops y el que mejores resultados dio fue el de 4mm. Un drop más bajo significa tener más cantidad de espuma en la zona delantera y darle mayor protagonismo a la espuma. Si a mucha cantidad de FuelCell (PEBA), además añadimos que la placa es más delgada, sobre todo en la zona delantera, esto le otorga menor rigidez y por eso decíamos que la sensación de placa se pierde algo. Esta placa sí que es más gruesa en la parte media para darle mayor estabilidad al modelo. Y como viene siendo costumbre, la placa viene con la tecnología Energy Arc, que es una curvatura con forma convexa en la zona media para que desde el primer momento que aterrizamos, la placa flexa y esta acumula esa energía para después liberarla.

Este Energy Arc, viene acompañado de un hueco en la mediasuela (si miramos la suela podemos ver la placa a través de él), esto aparte de reducir el peso, permite a la espuma expandirse con mayor facilidad. Un hueco en esta v4 algo más corto y que ya no deja a la placa tan expuesta al contacto con el suelo, sobre todo con piedras.

Geometrías cinceladas

Eso es la primera impresión que me llevé nada más verlas. Con esa mediasuela con cortes y formas geométricas nada redondeadas, que seguramente ayuden a controlar la compresión de la espuma.

El otro punto sobre el que quería hablar en este apartado es su rocker (curvatura de su mediasuela). A pesar de notar una horma ancha y con mucho contacto con el suelo, mi sensación al estar con ellas en pie es la de estar en todo momento en un balancín. Esto podría jugar en contra de su estabilidad, pero no es así, y lo que sí otorga es una sensación de fluidez desde la posición de medio pie hasta la punta. Tampoco vamos a notar una curvatura muy agresiva, de los que parece que dejan nuestros dedos en hiperextensión pero, me gusta esa sensación balancín de ella.

FantomFit y adiós al knit

Estas palabrejas que veis en el título reflejan otro gran cambio de este modelo. Abandona el upper knit (tipo calcetín) y lo sustituye por un mesh más tradicional, súper ligero y transpirable. Como decía, ganamos en transpirabilidad y mucho, pero perdemos en ajuste. También resuelven esos problemas de rozaduras en la zona del collar, con una bocana más tradicional, aunque sin mucho acolchado para controlar el peso. Si la zona del empeine es casi traslúcida, por los laterales se ve un pequeño refuerzo con mayor densidad para evitar materiales extra y dar sujeción al pie. Además, en la zona media, donde tenemos la “N” en una especie de termosellado, vemos un refuerzo interior que abraza el pie y lo sujeta. La lengüeta es delgada, sin demasiados detalles pero suficiente para proteger el empeine. Además, no va cosida a los laterales pero no parece que tenga tendencia a moverse hacia los lados.

Mejor agarre

Su suela también ha cambiado, tenemos un dibujo que segmenta en 3 partes de forma longitudinal a la zapatilla y donde, a diferencia de la v3, la zona central está más protegida en los metatarsos. Aprovechando para hablar de su base, tenemos una buena plataforma tanto en la zona delantera como trasera por lo que, dentro del segmento de competición, la podemos catalogar como de buena estabilidad.

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